14 de abril de 2011

Golfo di Napoli

“LA VOZ CORRE RÁPIDO”






Esta disimulada trattoría en el corazón de Nuñoa es sencilla y sin mayores pretensiones, pero brilla por la pulcritud de sus preparaciones en pasta y pizza. Es atendida por su dueño Vincenzo Guarino, oriundo del puerto de Nápoles, y desde el momento que uno se sienta, llegan los trozos de ciabatta con ricotta para abrir el apetito y matar el hambre.


Tiene una carta reducida pero segura: una quincena de pizzas; ravioles, gnoquis, spaguettis y fetuccinis, y a precios muy asequibles. Todos los platos oscilan entre los 3.500 y 5.700 pesos pero su tamaño es inabarcable para una persona, por eso es recomendable ir en grupo y compartir, para así probar de todo. De cualquier forma, los gnocchis, con cualquiera de sus salsas, son un imperdible.


Además, ofrece servicio de despacho a domicilio y el descorche de botella de vino por si no se quieren arriesgar a probar uno que no de la talla. El Golfo di Napoli cumple con las tres B: tiene onda; es rico; y muy económico. De todas formas deben reservar con anticipación ya que la voz corre muy rápido entre los comensales capitalinos.



Irarrázaval 2423. (calzada sur) Reservas # 3413675 Tiene estacionamiento Descorche de Vinos Martes a Sábado de 12:00 a 01:00 Domingos de 12:00 a 17:00 http://www.golfodinapoli.cl/


Pantaleón

“NOVELA GASTRONOMICA”

Con la más amplia carta de pisco sour comienza el estimulante viaje hacia la gastronomía peruana en Pantaleón, donde los infaltables de esta gastronomía como son el ají de gallina o las papas a la huancaína pasan a un segundo plano frente a las intensas delicias del ceviche mixto, chupe de camarones y leche de tigre, elaborados de una forma delicada y a un muy ventajoso precio.



Cuentan con tres locales. Uno en el centro, otro en el Barrio Bellavista y el último se ubica en una pequeña casa del barrio Manuel Montt, espacio que está repleto de bizarras y voluminosas pinturas que aluden a la novela Vargas Llosa. Pocas mesas y una atención muy amable del personal intrínsecamente peruano hacen a éste un lugar muy cálido, el cual invita con sobresalientes entradas y aperitivos, literalmente, a chuparse los dedos.


Por medio de la excelencia de sabores e ingredientes como el maíz, yuca, ají amarillo y rocoto, Pantaleón exacerba nuestras papilas gustativas llevándonos a una relectura gastronómica de lo más delicioso y tradicional del Perú.


Pantaleón. Manuel Montt 1807. Providencia.


Reservas al # 2747271


Sin Estacionamiento


Precio aprox. por persona: $10.000


www.restaurantpantaleon.cl


Aceitunas más sabrosas

Un muy buen dato de feria si quieres que las aceitunas sean aún más deliciosas es hacerle pequeños cortes tipo gajos todo alrededor. De esta forma el limón, aceite o cualquier otro sabor que le quieras dar podrá impregnarse mejor.


23 de febrero de 2011

Restaurant Ciudad Vieja

"EXQUISITEZ ENTRE PANES"



Existen muchos lugares donde comerse un buen sánguche -o sándwich, emparedado, sánduche o como quieran llamarle-, y los hay en todas las formas, rellenos y precios: el de potito en el Estadio Nacional; el de pernil en el Persa Bío-Bío; el de lomito en la Fuente Alemana; y otros más sofisticados como la hamburguesa del Tip y Tap. Cada uno tiene lo suyo -y cada boca su preferido-, pero hay pocos como los que se preparan en el “Ciudad Vieja”.

Situado en el centro gastronómico del barrio Bellavista, se instala esta sanguchería que alude a la haute cuisine, pero entre tapas. De distintas masas y tamaños un pan italiano, pita, marraqueta, baguette o el infaltable pan amasado pueden hacer de la elección un deleite. De la mano del dueño y chef del ya renombrado “Ciudadano”, este restaurant que tiene cerca de un año de edad, combina ingredientes de la más peculiar manera y con elaboraciones especiales para cada uno. Costillar cocinado en malta y miel, camote frito, papas hilo y espárragos a la mantequilla son algunos de los elementos presentes en sus platos.

Entre los recomendables de “Ciudad Vieja” está el clásico sánguche de Carne Mechada (cocida en salsa de tomate casera, con mayonesa de ajo, papas hilo y champiñones ostra salteados), el Rupanco (láminas de salmón ahumado, queso crema, jengibre y lechuga), y si están con intenciones de innovar pueden arriesgarse con el de Ají de Gallina (tradicional plato peruano de pollo desmenuzado con salsa de ají amarillo, con lechuga, papas cocidas y aceituna morada).


Y como es imposible concebir un sándwich sin cerveza, aquí ofrecen más de 50 tipos de estos brebajes para acompañar, pudiendo elegir entre una nacional o internacional, artesanal o industrial, lager o ámbar, o sea para todos los gustos y caprichos.
Ciudad Vieja, como una mezcla de cocina chilena con sabores latinoamericanos y pretensiones sibaritas, que José Luís Merino ha elaborado para los sangucheros de la capital, y aquellos que están de paso.

Constitución 92.
Barrio Bellavista, Providencia.
Reservas # 2489548.

Abierto de Lunes a Sábado almuerzo y cena.

Precio promedio $8.000.

www.ciudadvieja.cl

Restaurant Japón


Luego del boom de los sushis, se ha vuelto un tanto difícil elegir un lugar rico y diferente de comida japonesa, sobre en todo en una ciudad en que hay más restaurantes de éste tipo que farmacias –y hay farmacias en cada esquina-. Por esta y otras razones, lo tradicional está de moda y el Japón es un muy buen ejemplo.

Aunque no es tan popular y masivo como otros locales, el Japón, inaugurado en 1978 y ubicado en el perímetro de la Plaza Italia, es el restaurant japonés más antiguo de la capital y se caracteriza por mantener ciertas costumbres milenarias del país nipón, que le han permitido consolidarse como el lugar preferido de la colonia japonesa en Chile. Según uno de los meseros el 70% del público es japonés, y se nota. Es común ver personas de ojos rasgados comiendo solos y disfrutando de una sopa que parece cazuela -pero al estilo asiático-, y dominando los palitos como si fueran una prolongación de sus manos.

Son seis salones en su interior y están separados por cortinas. Algunos de ellos antiguamente requerían de una reverencia al entrar, y hay otros en los que el comensal debe sacarse los zapatos hasta el día de hoy. Todo empieza con un pequeño plato de ceviche para abrir los sentidos, en especial el gusto, acompañado de una toalla mojada para limpiarse las manos, ya sea antes, durante o después de comer.

La carta del Japón ofrece gran variedad de platos calientes, fríos, crudos, cocidos y ahumados, siempre respetando las esencias y la frescura de sus ingredientes, con el pescado jugando un rol fundamental en cuanto a tipos cortes y preparaciones.

Para recomendar se encuentra el atún a la plancha con salsa teriyaki acompañado de verduritas –el diminutivo se debe a la cantidad de verduras que lo rodean-. También tienen anguila en todos sus formatos, pescado que no se encuentra en cualquier restaurant de la capital y que en éste es un imperdible como el baterra unagui, el unagui don, nigiri unagui, etc., cocinados por sus chefs japoneses en el mesón pulcro y abierto al público en la barra.

De todas formas una experiencia para llevar a cabo una o más veces, ya que hay muchos platos que sin duda se deben probar.

Barón Pierre de Coubertin 39
(Ex Marcoleta) Metro Baquedano Santiago.
Reservas # 222 4517
Se aceptan tarjetas, no así cheques.
Estacionamiento en Hotel Nippon

Restaurant Normandie


Desde el año 2003, y en uno de los lugares más estratégicos de la avenida Providencia (casi esquina Manuel Montt), en Santiago, se encuentra el restaurant Normandie, un “bistrot santiaguino” como podría llamársele.

Ambientado en un típico café parisino, el lugar es muy cálido y al mismo tiempo distendido. Da para toda ocasión: cena en pareja, almuerzo de negocios o encuentro entre amigos. Si bien la carta no es tan amplia, sí es completa y variada, siempre inclinada hacia lo galo, por supuesto.

Para empezar, pancito con mantequilla y foie gras casero a la mesa acompañado de un whisky sour o champagne, lo cual podría resultar muy efectivo para abrir el apetito. Sin embargo, la elección de plato de fondo se puede tornar un tanto difícil entre tantos manjares disponibles como pato a la naranja, trucha rellena y suaves pero sabrosos crepes. Incluso a veces la tentación podría terminar en la entrada con una imperdible sopa de cebolla o una olla de choritos al vapor (la cual en el menú es ofrecida como "para 2", pero la verdad que pueden comer varios más).

Simplemente, el Normandie, es de esos lugares donde a uno le gustaría probar todo, pero que lamentablemente no se puede. De todas formas, estará un buen tiempo ahí y a un precio muy amigable esperando ser visitado, ya sea para comer o compartir un trago entre amigos.

Avda. Providencia 1234, Providencia.
Telefono #2363011
Salón para fumadores y no fumadores
Lunes a Jueves hasta la 1:00 AM
Viernes y Sábado hasta las 3:00 AM.
www.normandie1234.cl

30 de noviembre de 2010

Nace Tenemos Hambre

Desde hoy tenemos un sitio para visitar cuando tengamos hambre! Recetas, datos de restoranes, tips a la hora de cocinar y todo lo relacionado con la comida!
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